Nos encantan los contrastes bien pensados. Cuando nos plantamos frente a una habitación en armonía y donde todos los elementos y colores tienen un balance, la imagen nos atrapa de tal forma que nos podemos quedar observando durante horas. En mi caso, para retener al máximo posible esa sensación, los detalles y poder reproducirlos más tarde en casa, cosa bien difícil por otro lado, porque cada espacio de base, con su iluminación y materiales, son diferentes.
El suelo de madera negra o muy oscura en una vivienda decorada en estilo nórdico moderno llena de blanco y neutros, aporta mucha calidez. Es como si recogiera de forma robusta todos los elementos, al contrario que un suelo blanco, que a veces parece que los repele.
Tanto el suelo negro, como el blanco, los amas o los odias ya que los dos tienen tendencia a atrapar polvo y huellas y requieren de limpieza a conciencia diaria, pero estéticamente dan mucho juego.
En este piso sueco podéis ver los dos, suelo negro para todas las zonas comunes incluido el recibidor y blanco para el dormitorio, ¿con cual os quedáis? yo con el negro, no! con el blanco… difícil… :) Por cierto, observad la puerta que comunica el salón con el dormitorio, ¿os acordáis que el otro día hablaba de ellas, de las puertas correderas tipo granero? en este salón queda fantásticamente bien. ¡Feliz lunes!
Vía: Alvhem
3 Comments
AIXŌ
22/06/2015 at 10:03Hace tiempo estuve en un apartamento en Lisboa con el típico suelo de pino teñido de negro, el resto era blanco. Muy bonito, quedaba genial pero…no para mi casa, ni el blanco ni el negro. O tienes a alguien que limpie a diario o te conviertes en esclavo de la escoba.
DECORATECA
22/06/2015 at 17:00Preciosos, tanto el negro como el blanco, pero… mejor para ver. Como decís, en casa es complicado mantener estos suelos. Por cierto, el piso es realmente bonito. ¡Un abrazo!
Cristina Núñez - Servicolor
30/06/2015 at 08:18Es verdad que son complicados de mantener, pero quedan tan bonitos… Nosotros nos quedamos con el blanco.