Cuanto menos chillones sean los colores de nuestra decoración, más serena será ésta y más sensación de bienestar conseguiremos en casa.
Si buscamos crear un hogar, al que volver cada tarde, de un mundo lleno de estímulos, ritmo frenético y ruidos, la mejor opción es elegir una gama de colores neutros o suaves para crear una decoración serena.
Dejaremos mejor los colores fuertes y decoraciones excesivas y coloridas, para los más creativos, que necesiten activarse e inspirarse en casa. Con los colores suaves iremos sobre seguro, no nos cansaremos tanto de nuestros muebles y paredes y nos invitarán a realizar actividades pausadas, que calmen nuestro ánimo.
Entre estos colores suaves, el blanco es la mejor opción para paredes, techos y gran mobiliario, toda la gama de grises y grises con tono como el mint y colores pastel para pequeños accesorios y textiles, sin olvidar toques de madera en colores claros, que aportarán la nota natural. Los contrastes, si queremos ponerlos, será mejor que sean en grises oscuros o versión oscuras de colores fríos como el azúl.
La mejor forma de saber como usar estos colores es fijarnos en ejemplos gráficos y este apartamento sueco a continuación, seguro que os inspira y os ayuda a entender mejor ese estilo sereno y ponerlo en práctica en casa, a ver que os parece ¡feliz martes!
Vía: cepaynasi
2 Comments
Gina
26/09/2017 at 06:25Me encanta, me gusta todo. La casa por si misma ya es preciosa, el espacio, la luz natural… Y si además le añadimos el buén gusto en decoración el resultado es increíble.
micieloazul
26/09/2017 at 16:48ya decía yo que lo había visto en cepaynasi lo único malo es que nunca pone los planos que es lo que más me gusta! jeje
Definitivamente el sofá gris y el color mint de la cocina son mis favoritos.
Me cuesta creer que la sala esté en el piso superior pero es lo más práctico para aprovechar el espacio