Este moderno bajo ocupa lo que fuese una fábrica en Gotemburgo, Suecia. En sus paredes y techos, con tuberías suspendidas, rememoramos el pasado del local, en el interiorismo y el mobiliario, la modernidad.
Este jueves os presentamos una vivienda de 58 m² no apta para todos los públicos y no por el interior o la distribución, sino por estar a nivel de calle sin protección de persianas, cortinas o cristales ahumados.
La decoración mezcla el estilo nórdico en su versión oscura y masculina con el industrial. Carpintería de hierro y puertas de cristal se combinan con suelos de madera maciza, paredes de ladrillo visto y una planta abierta, prácticamente diáfana.
Especial mención para el dormitorio increíblemente acogedor, con disposición simétrica de dos mesitas a los lados de la cama iguales, con lámparas iguales también.
Sobre la cama la versión Camel de la famosa manta Cross Blanket de la sueca Pia Wallén. ¿Qué os parece? ¿Os atreveríais a vivir en un lugar así? ¡feliz jueves!
Vía: Alvhem
4 Comments
natalia
22/02/2018 at 15:24Me encantó! La versión obscura nórdica me gusta mas. Aunque yo le pondría cortinas .
Noe Sumeragi
23/02/2018 at 06:38Me parece muy bonito, e iluminado muy teatral y acogedoramente. Eso si, yo también creo que unas cortinas o vinilos en los vidrios, no le sobraban…
Yolanda
01/01/2020 at 02:20Me encanta, aunque me recuerda las viviendas de policías con problemas que salen en las películas.
Hubiera estado bien tener una fotografía de la fachada del edificio y la calle.
Si el interior es visible para las personas que pasan por la calle sería importante tener algo en las ventanas que aporte privacidad
delikatissen
08/01/2020 at 09:31si con eso te refieres a que te recuerda a una vivienda tipo loft, estamos de acuerdo, pero nada negativo en eso — por cierto, en los países nórdicos lo de las persianas y cortinas no es estándar, poca gente las tiene, directamente pasan de lo que opine otra gente, si alguna vez vas y te das una vuelta de noche, verás como la gente hace su vida a través de las ventanas sin importarles si alguien mira