Tener en cuenta nuestro estilo de vida es la primera premisa a la hora de distribuir y decorar una vivienda.
Por mucho que haya unos estándares y a veces se generalice, cada uno tenemos un estilo de vida diferente y particular que es lo único que debe influir en el aspecto de nuestra casa.
Nuestros trabajos, estudios, hobbies, vida en la ciudad, en el campo, en solitario, en familia, nuestro salario, etc. determinan cómo deberíamos vivir y dónde, por mucho que otros quieran aconsejarnos o imponernos.
Si como en este piso vivimos en un espacio total de 39 m² y decidimos tener una cocina amplia y grande con una mesa de comedor y hasta 6 sillas las tenemos sin importarnos que el dormitorio sea parte del salón.
Seguramente su habitante sea aficionado a la cocina y le guste recibir a sus amigos en casa para precisamente cocinarles y por otro lado, la zona de descanso del pequeño piso sea mas privada y no reciba visitas, a él le funciona y por eso es su hogar perfecto.
Su estilo de vida, hobbies y gustos ha definido tanto la distribución del espacio, como la decoración, elección de mobiliario, etc. A muchos no les convencerá y preferirían tener el dormitorio completamente separado y haber hecho cocina-salón-comedor todo uno, pero a otros con vidas y gustos similares, si les parecerá genial. Nada está bien, ni está mal, hay que romper con esos estándares ya que no a todos nos van bien.
Lo mejor y mas divertido es ser creativos con nuestro hogar, pero sobre todo prácticos y pensar de verdad en las necesidades de uno mismo, no vale la pena tener una habitación de invitados si solo tenemos visitas que se queden a dormir una vez al año o menos, hay hoteles estupendos y ese espacio podemos aprovecharlo para infinidad de cosas, una habitación de juegos, un estudio, un vestidor, una lavandería, un gimnasio… lo que nos de la gana. Seguro que este apartamento os encanta :).
Vía: Alvhem
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