¡Hola! Soy Abel de Gonzalez y volvemos después de las vacaciones con otro maravilloso local, esta vez el mítico restaurante Savoy; el que fuera diseñado por los arquitectos Aino y Alvar Aalto en Helsinki en el año 1937, con un auténtico estilo nórdico puro.
El rediseño corre a cargo de la fabulosa Ilse Crawford. Una mujer con un “palmarés” de envidia, y con un buen saber hacer como pocos profesionales he conocido.
El restaurante llevaba más de 80 años sin reformarse excepto por un apaño por aquí y otro por allá. Así pues, el espacio estaba pidiendo a gritos una renovación a la altura de su nombre.
Pero no podía ser una renovación cualquiera, sino una que perpetuara la esencia pura nórdica impresa por los diseñadores originales allá por la década de los 30, donde lo “comercial” todavía no había arruinado la mayoría de estilos decorativos.
El resultado es soberbio. Espacio, muebles y decoración se han acondicionado perfectamente a nuestros días, logrando una estética contemporánea, quitándole la pátina de solera que cubría cada rincón, pero todo ello conservando el verdadero estilo nórdico.
Por ello nos encontramos con un espacio con fuerza, con personalidad, que se sale de lo que todo el mundo a día de hoy conoce como nórdico, ya que este estilo, estos muebles y esta estética, sí que es auténtica. Ya me diréis qué os sugiere. A mí, una soberana elegancia. Que lo disfrutéis.
Fotografías: Anton Sucksdorff
2 Comments
Yolanda
10/09/2020 at 09:21Se ve muy íntimo y acogedor. A veces la decoración es cuestión más de los sentimientos que te produce estar en un sitio, que de analizar sus elementos.
Puede haber sitios muy bien decorados pero que te produzcan frialdad.
Lo único que no me convence es tanta oscuridad.
Las sillas me parecen divinas. La comodidad no debería estar reñida con la funcionalidad. El hecho de que comer sea solo para un rato, no significa que tengamos que comer en sillas duras.
delikatissen
10/09/2020 at 10:52Cierto es que los sentimientos hacen mucho a la hora de como se experimenta y recuerda un lugar, pero en este caso concreto hablamos del ‘Savoy’, un icono en si mismo en el mundo de la restauración y del diseño nórdico. Llevan abiertos más de 80 años, y a pesar de modas y tendencias pasajeras han sabido mantener el romanticismo y la elegancia de la época en la que se creo, en la década de los 40.