En este pequeño apartamento de 65 m² se mezclan muebles low cost, de diseño y agradables texturas en suelo y paredes.
Podría ser un efecto conseguido con pintura, pero no, la pared de la cocina, el espacio que está encima de los muebles, es cemento pulido, un material que solemos ver en suelos, pero que no es tan habitual en paredes, especialmente en apartamentos.
Nos gusta el efecto que produce, nos resulta de hecho más cálido que una baldosa blanca y aunque en principio podría dar un aire industrial a la habitación, no lo hace se ve acogedora y nada fría.
Probablemente ayuda mucho la buena iluminación natural de la cocina gracias al ventanal, la gran alfombra y el conjunto de comedor formado por una mesa de madera natural y 3 sillas desparejadas (un butacón antiguo de rejilla, una silla CH24 de Carl Hansen y una silla Drop de Fritz Hansen).
En el salon la misma estrategia decorativa para dar calidez, iluminación natural, gran alfombra, textiles y alguna pieza que otra de diseño como la butaca negra Plywood Group LCM de Vitra.
Es un apartamento muy recogido a pesar de esa planta tan rectangular ¿no os parece? ¡feliz jueves!
Vía: Alvhem
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