Puede ser el contraste que consigue una nota de color o la textura inesperada en una superficie, lo importante es no desestimar el poder de un elemento diferente en nuestra decoración.
En esta cocina nórdica tan maravillosa tenéis varios ejemplos de cómo llamar la atención o cambiar el punto de interés de forma muy sencilla, uno de ellos es esa planta de hojas fucsia colocada sobre el alfeizar de la ventana, sin querer, en el primer golpe de vista de la habitación los ojos se nos van a ella.
Por la forma en que están tomadas algunas fotos de la cocina, en ángulo y mostrando toda la longitud de esta, la vista se nos va inevitablemente a la ventana, pero es la planta de ese color llamativo, la que nos retiene ahí. Eso es gracias al color tan distinto al resto, es inesperado y rompe con el hilo conductor.
Como en este caso es una planta de hojas pequeñas, es efectivo, equilibrado y a la vez discreto, imaginad si fuera una planta de hojas grandes, nos causaría otra sensación diferente.
Otro ejemplo de cómo en la cocina sutilmente se cambia y se combina el estilo y el hilo conductor decorativo, es el uso de la lámpara y las sillas negras, de nuevo, el contraste, a pesar de ser negro sobre blanco y madera, es moderado, ya que son piezas ligeras.
El revestimiento de la cocina entre la encimera y los muebles superiores sería otro pequeño detalle que puede cambiar por completo la decoración de esta cocina, si fuera todo blanco, pasaría todo inadvertido, pero ese mosaico de teselas, nos mantiene ahí, hace que enfoquemos a esa parte.
¿Qué detalles utilizáis vosotros para cambiar la decoración? ¿Una planta, un cuadro, un cojín… ? ¿Os gusta esta cocina? contadnos, ¡feliz martes!
Vía: Alvhem
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Mónica
13/09/2022 at 21:53A mi siempre se me van los ojos a los alféizares, a los ventanales, a las plantas que suelen tener en ellas y a los pequeños detalles de decoración que hay en las estancias, más que a la distribución de la vivienda …