El parquet en espiga nos traslada a las viviendas señoriales de principios del siglo pasado. Los listones de madera se colocan en el suelo en ángulo recto y forman una cenefa que recuerda a las espigas.
Es un elemento que encaja a la perfección en decoraciones clásicas y de estilo nórdico, aunque por su calidad y belleza pueden colocarse en casi cualquier estilo decorativo actual.
En este apartamento de 147 m² el parquet en espiga está colocado en el comedor, el salón y un dormitorio, como el edificio data de 1929, imaginamos que era el tipo de suelo original y en las renovaciones posteriores han elegido mantener el estilo en esas habitaciones.
Además del suelo, esta vivienda tiene las características puertas de doble hoja correderas entre habitaciones, de madera lacadas en blanco, perfectas para separar/unir un salón- comedor por ejemplo. Las ventanas plomadas del salón es otra característica de época que han mantenido, preciosas con esa cuadrícula.
Si miramos al techo, las molduras y rosetones son otros elementos que nos llevan al pasado, suelen identificarse con un estilo más clásico y que siguen estando perfectamente integrados en una decoración moderna ¿no os parece? ¡feliz jueves!
Vía: Bolaget
No Comments