La clave de ese éxito es cuestión de espacio, iluminación y una arquitectura diferente, buscando un hogar único y con más personalidad que el resto.
Los áticos con techos abuhardillados ofrecen en la mayoría de los casos sensación de amplitud y encanto, ya que los techos altos pueden hacer que la habitación se sienta más grande de lo que realmente es. Además, la forma inclinada del techo puede crear un ambiente acogedor y hogareño en la habitación.
Los áticos con techos abuhardillados son una característica común de las casas y apartamentos construidos en el estilo arquitectónico tradicional europeo y muy apreciados en la actualidad, ya que hay esta tendencia a abrir los espacios y tirar paredes.
En este ático sueco le han sacado mucho partido con esas ventanas / claraboyas que han abierto en medio del salón y alojando todas las zonas de día en una gran habitación, si miráis el plano podéis ver como ocupa más de la mitad de la vivienda.
Hay algunas consideraciones prácticas a tener en cuenta al vivir en un ático con techo abuhardillado. Por ejemplo, la forma inclinada del techo puede limitar la altura de los muebles que se pueden colocar en la habitación, en este caso concreto, podéis ver como las dos paredes de los extremos se han resuelto, en un lado hay una estantería que casi sigue la forma inclinada y en el otro la cocina, adaptando el mobiliario superior, sobre todo, a esa forma rematando con unas baldas.
La verdad es que son poquitos inconvenientes cuando se ve el resultado global ¿no creéis? ¡feliz martes!
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