Imaginad este mismo apartamento con otro suelo, uno por ejemplo típico de los que se construyen en España, ¿a qué no sería lo mismo ni de lejos? ese es el poder de un revestimiento de calidad y elegante como este suelo de madera maciza en espiga.
Este tipo de suelo nunca ha pasado de moda en la decoración de interiores, especialmente en el estilo nórdico, debido a su apariencia sofisticada y su capacidad para complementar una decoración sencilla y funcional.
Como veis, la decoración es bastante simple y minimalista, pocos elementos bien elegidos, casi cada uno de ellos tiene además de su función, una labor estética como si de esculturas se tratara.
El efecto general es una atmósfera cálida y distinguida, muy relajante gracias a la paleta de tonos neutros utilizada, con la madera como protagonista entre tonos beige y blanco roto, solo en el salón con ese cuadro de colores vibrantes sobre el sofá, que la verdad, a nosotros no nos gusta mucho, ni el estilo, ni la forma, ni el tamaño… pero ya se sabe esto del arte…. :)).
La cocina es llamativa por ocupar toda la pared del suelo al techo completamente equipada, con muchísimo espacio de almacenaje.
En el dormitorio continúan los tonos arena y destaca un neutro algo particular, un bonito tono oscuro azulado – gris en una de las paredes, casi a modo de cabecero de la cama, del que también han pintado el armario, quedando este completamente camuflado.
¿Qué pensáis del suelo, creéis que de verdad hace diferencia en una pequeña vivienda como esta? Nostros lo tendríamos en toda la casa, nos maravilla el look y el tacto. ¡Feliz miércoles!
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