Si el miniático de ayer nos gustó por su luminosidad y buena distribución, este dúplex que os presentamos hoy no se queda atrás.
Es un poquito más grande 40 m² divididos en dos plantas y de nuevo, la falta de espacio esta suplida por una bonita estética, unos buenos acabados y mobiliario ligero y funcional.
Nos gusta especialmente de esta vivienda como han separado perfectamente las zonas de día, de las de noche o las más ‘publicas’, de las privadas.
El piso de arriba es exclusivo privado para su dueña y la planta baja para recibir a las visitas, incluso el baño está ahí, así que nadie tiene que subir al dormitorio / salón. Es un espacio muy acogedor, con sitio para un pequeño sofa, espacio de almacenaje y esa pared de palillería de madera tan cálida detrás de la tele.
La parte de abajo es más formal y minimalista, con alto contraste de las paredes blancas y mobiliario de diseño negro mate, una combinación que cuando está bien hecha, las proporciones y los tonos, nunca defrauda. ¿Qué os gusta más el piso de arriba o el de abajo? ¡feliz miércoles!
Vía: Historiska hem
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