Nos gustan los hogares con estilo que salen un poco del estándar sin ser excesivamente llamativos, un toque original basta para que una vivienda tenga personalidad y sea única.
El trabajo de pintura en este pequeño apartamento en de 58 m2 en Malmö, Suecia ha sido pensado meticulosamente, para ser armónico, cálido y calmado a la vez.
El azul grisáceo de cocina y salón en tonos mate empolvados, son perfectos para crear ambientes serenos y tranquilos, complementan a la perfección el suelo de madera y mobiliario blanco.
El más llamativo de los colores utilizados en el apartamento es el color rosa viejo en las paredes del recibidor, de nuevo, en un tono mate empolvado, que, da lugar a una entrada suave y agradable, que invita a quedarse en casa por lo acogedora que es.
Es un recibidor – pasillo perfecto, con poquitos elementos, funcional y lleno de estilo. ¡Feliz miércoles!
Vía: BoLaget
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