Al sueste de Estocolmo, en Dalarö, junto al mar Báltico, se encuentra esta pintoresca casa de vacaciones, construida en 1885, que combina a la perfección la decoración nórdica y el estilo costero.
En total algo más de 700 m² de terreno con una pequeña vivienda principal de 75 m² y varios anexos: 2 casas de invitados, sauna, etc.
El interior es típico de muchas casas de madera junto al mar, pintado todo de blanco, y en este caso con detalles originales del año de construcción como los grandes ventanales con todas esas molduras y el muelle propio.
Como muchas otras casas de verano el mobiliario es sencillo y funcional, se trata de estar cómo y contar lo necesario, sin excesos, aunque el auténtico foco está en el entorno, las vistas y disfrutar de la vida al aire libre cuando se pueda.
Es la casa perfecta para desconectar, relajarse y disfrutar de la compañía de la familia y amigos en un ambiente cálido y acogedor. Fijaos qué sencillo es ese toque coastal decorativo, ¿os gusta? ¡feliz martes!
Vía: Skeppsholmen
2 Comments
Beachlife_Morocco
11/06/2024 at 11:44Preciosa casita sencilla y acogedora.
lara
17/06/2024 at 10:52Me encanta cómo el mobiliario sencillo y funcional se adapta tan bien al entorno, permitiendo disfrutar al máximo de las vistas y la vida al aire libre. Sin duda, es un lugar ideal para desconectar y relajarse en compañía de familiares y amigos.
Este artículo me ha inspirado para explorar más sobre la decoración costera en mi propio blog. ¡Gracias por compartir esta hermosa casa de vacaciones!