Cuando se trata de buen diseño, el tamaño no importa, la prueba este pequeño apartamento sueco decorado con mucho estilo.
Cada centímetro cuadrado está aprovechado al máximo, creando un espacio funcional y estéticamente agradable.
La sala de estar: un rincón para relajarse
La sala de estar es el corazón del apartamento. Un gran ventanal inunda el espacio de luz natural, creando un ambiente acogedor y relajante.
El sofá de dos plazas, los cojines suaves y la alfombra mullida, sobre el suelo de parquet de roble, invitan a pasar largas tardes leyendo un buen libro o viendo una película.
Las plantas de interior añaden un toque de vida y frescura al ambiente y el toque sofisticado lo aporta la lámpara Vertigo de Petite Friture, de formas curvas sinuosas y el resto de lamparitas de diseño dispersadas por el salón.
La cocina: un espacio eficiente y luminoso
La cocina, aunque cerrada, es un espacio lleno de vida. Los armarios de color gris claro y la encimera de compuesto de mármol blanco crean una sensación de amplitud y luminosidad.
El suelo de madera clara unifica el espacio y aporta calidez. La pared de azulejos blancos estilo metro añade un toque clásico y atemporal. Una cocina pequeña pero perfectamente equipada para cocinar y recibir invitados, con el espacio en la zona de comedor.
Nos gustan mucho estos apartamentos nórdicos sin complicaciones, con una decoración sencilla pero elegante y práctica y muy luminosa. Sin olvidar el rinconcito de exterior en el balcón, un lugar de relax para los días soleados suecos. ¡Feliz jueves!
Fotos propiedad Mäklarhuset
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